Lo que tienes que saber sobre Laura…

Mi nombre es Laura Pastor. En mi esfera profesional me encontrarás como fisioterapeuta y psiconeuroinmunóloga clínica, especializada en salud uroginecológica, obstétrica y sexual. Tengo la gran suerte de dedicarme a algo que desde muy pequeña me ha apasionado: la salud. Soy terapeuta, docente y co-creadora del podcast El Club De Las Vaginas.

La razón de embarcarme en este congreso es mi firme convicción sobre la necesidad de transmitir conocimiento accesible a todos los públicos. La información es (em)PODER(afem), y ahí entra el autoconocimiento.

Si te preguntas qué me llevó a especializarme en salud pélvica puedo contestarte que yo, a lo largo de mi vida (que ya suma 40 primaveras), he pasado por donde probablemente tú estás pasando: he sentido miedo del dolor sexual e incluso lo llegué a normalizar, tuve dispareunia en mis primeros años de relaciones porque no sabía nada de mi cuerpo.

He padecido dolor menstrual invalidante y he sufrido cistitis recidivantes que empeoraron durante dos años mi calidad de vida en todos los sentidos. Viví durante mucho tiempo alienada del conocimiento de mi cuerpo, porque simplemente creía que ese conocimiento me estaba vetado.
Hasta que me topé con la especialidad a la que actualmente le dedico gran parte de la semana.

Cuando no soy fisioterapeuta, me dedico a vivir la vida como un 7 bien centrado (y si quieres saber sobre números y eneagramas, le preguntas a Rosaura, la que nos ha liado con todo esto 😉 )

Vivo con mi pareja y con una simpática pastora alemana, Shiba. Me gusta la fotografía, el submarinismo, cocinar y el deporte al aire libre. Intento predicar mi terapia con el ejemplo, pero te voy a ser sincera, a veces se me van de las manos el chocolate y el café…

Las tardes de domingo no me busques, las tengo reservadas para maratones de series y películas mientras devoro palomitas con mi partner in crime.

Bienvenida a este congreso. No me voy a callar nada.

Sobre esta ponencia…

El dolor durante las relaciones sexuales es algo que se ha mantenido normalizado durante años. Cuando ese dolor implica imposibilidad de mantener relaciones sexuales coitales, hablamos de vaginismo. Ciertamente, la línea entre vaginismo y dispareunia es muy fina, pero de lo que no cabe duda es de la gran ayuda que puede ofrecer la fisioterapia a la hora de tratar este problema. Sin perder de vista la esfera biopsicosocial de cada mujer y sin perder de vista el trabajo multidisciplinar, te voy a revelar cómo la fisioterapia del suelo pélvico puede ayudarte, tanto en consulta como en tu casa. Si padeces vaginismo, la fisioterapia puede ser un camino para ti.

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